29 de agosto de 2009

cañon del leza

De leza

por fin el esperado video del cañón del Leza, digo esperado por que lleva imagenes y videos de 3 veces diferentes, espaciadas por dos años.
espero que lo disfruteis.

11 de julio de 2009

costa rica

estoy escribiendo algo al respecto, pero para que veais las fotos, os pongo el enlace:
costa rica

he decidido ir poniendo capitulos, ya que si no es muy largo.
bueno hecho, los 3 capitulos de las 3 paradas en el viaje:

TORTUGUERO

Cuando leía que a Tortuguero no se podía ir en coche, pensaba, ilusa de mi, que seria terreno pantanoso y que por ese motivo había que ir en barca, que va!, Tortuguero es la selva, y no hay caminos ni carreteras en la selva, menos mal!, del embarcadero a nuestro hotel hay mas de una hora en la barca de marras, y no precisamente por que vaya a remos eh? enseguida te das cuenta que no hay posibilidad de hacer el recorrido por tierra, la vegetación lo invade todo, los huecos obvios y los no lo son tanto, los troncos de los árboles en muchos casos no llegan a verse, ya que están cubiertos de plantas que viven sobre ellos, lianas, helechos, etc., incluso hay plantas que afianzan las raíces en la orilla y se expanden por el canal, reduciéndolo a la mitad, como una suerte de colesterol verde :-). La selva crece y se descompone, es el reciclaje constante, las plantas mueren y siempre hay algún animal que lo aprovecha, un circulo perfecto.
Tortuguero es precioso, y no por bonito (que lo es), sino por el propio concepto de lo que es, una reserva, vida salvaje, mínima invasión por parte del hombre...bueno para atentar contra esto último, ya traigo yo a mis dos salvajes, que según llegan al hotel, del cual según David, lo más importante es que tiene una piscina con forma de tortuga, lo primero que hacen es meterse en ella, ya sabéis en silencio, como siempre..., bueno no, en realidad se parecían a los monos aulladores residentes en el arbolado del hotel.
El tour por los canales, es inspirador, las fortalezas y debilidades de la naturaleza, la fuerza arrolladora de la vida que se despliega ante nuestros ojos, es realmente frágil al avance de la "civilización", tendríamos que mimar más nuestro hogar.
El canal elegido es Caño Palma, de aguas negras, la línea divisoria se distingue con claridad en la confluencia con el canal más grande desde el que accedemos, la causa son los taninos de la clorofila de las plantas, que diluidos en el agua le dan ese color característico, la superficie se convierte en un espejo, las raíces en forma de "gamba" de los árboles se desdoblan en su encuentro con el agua, aportando magia al entorno.
Los animales se suceden a lo largo del recorrido, en lo alto de un árbol un perezoso de 2 dedos, una garza tigre, tucanes pico iris de un color verde acido, un martín pescador collarejo bastante grande, un aninga con las alas abiertas para secarse, una garza espalda verde cazando en el río, un putu o pájaro estaca pariente de los búhos, varias loras, monos carablanca, aulladores y araña, estos últimos cruzando el río, por encima de nuestras cabezas, unas nutrias cuyo avance debajo del agua se adivina por las burbujas que van dejando a su paso, un basilisco que en última instancia hostigado por nuestro avance y de mala gana salió huyendo corriendo por encima del agua, un caimán más grande de lo que parecía en un principio, un grupo de tortugas negras comunes acostumbradas a las barcas dado su acercamiento...como los documentales de la 2 pero en vivo, yo lo disfruto como una enana. Para los niños lo más, pero lo más importante es llevar unos prismáticos, acercar un poco más los animales debe ser la leche, el hecho de llevar solo uno para dos niños, es un arma de doble filo, cuando lo tiene uno lo quiere el otro, pero al mismo tiempo es algo atractivo, que si lo tuvieran a tiempo completo no tendría el mismo interés, respecto a lo que ven con ellos, no lo tengo muy claro pero entretenidos están.
En la selva el día cunde mucho, claro! te levantas a las 5 de la mañana!, hemos vuelto del tour por los canales y justo ahora abren el comedor para desayunar, así que queda toda la mañana de galbana en la piscina, que pereza, decidimos ir al canopy, nos han dicho que en Arenal los hay de más adrenalina, pero ahora tenemos tiempo y allí no se como andaremos, además a Pablo le cuesta decidirse, si le digo que son 150 metro de altura no va, así que nos quedamos con este a una altura máxima de 20 metros sobre el suelo de la selva, es divertido, las tirolinas te dejan ver la selva desde arriba, y es suficiente para un poco de velocidad en un sitio tan calmado.
La excursión al pueblo, es interesante, aunque sus casas se ven enfrente mismo del embarcadero del hotel, no hay forma de ir por tu cuenta, otra cosa que yo no comprendí cuando leía sobre ello, la laguna de Tortuguero entre ambas orillas, es tan ancha como dos veces el Ebro, si encuentras transporte vale pero si no na de na. Nuestro guía Rey, nos cuenta usos tradicionales de diversas plantas locales, antimosquitos (zorosi), cicatrizantes para las heridas (cordoncillo o piperácea), bayas y frutos comestibles (árbol del pan), antitérmicos (zorosi también pero preparado en te), jingibre de montaña o caña agria que guarda agua en su interior, y hasta un crecepelo (gloria de la playa en la mañana), su conocimiento es extenso y disfruta transmitiéndolo, nombra a menudo a su padre, fallecido hace 5 meses, que sacó adelante a 8 criaturas en ese entorno gracias a estos conocimientos. Nos cuenta también que cuando él era niño, los americanos se llevaron miles de huevos de las tortugas que dan nombre al lugar, con la esperanza de que poblaran sus playas, arrogancia contra testarudez, siguen prefiriendo las arenas maternas, aunque solo vuelvan tras 25 años, a desovar.
En nuestro tiempo libre, deambulamos por el pueblo, unos niños juegan a las canicas, y me quedo un rato tratando de averiguar las normas del juego, resulta apacible saber que hay niños en algún lugar del mundo, que se pueden divertir horas con unas cuantas canicas y un dibujo en la tierra suelta del camino, otro niño con una bicicleta, que en unos años será de su talla, me sobrepasa, el ritmo del pueblo es tranquilo, el colegio ha terminado hace un rato. El puesto de policía luce un par de sillas ocupadas por dos uniformados policías que son la viva imagen de la despreocupación. En una explanada al lado de la colada secándose, la agencia de viajes clic clic, que lo mismo te lleva de treking por la selva que a Honolulu. La calle termina abruptamente en la entrada al parque nacional de Tortuguero. En el embarcadero, esperamos a todos para volver al hotel, nos hemos ido desperdigando, pero poco a poco, la gente se va reuniendo. Cuando el ritmo en mi vida me resulta demasiado frenético, me paro a pensar que todos los días amanece en sitios como este, que son lugares reales, que también existen y su poso tranquilo me alcanza cuando lo necesito.

ARENAL

La erupción nos pilla de sorpresa a los pies del volcán, es sorda, potente y vibra bajo nuestros pies, y me dan ganas de quitarme las zapatillas para notarla mejor, pero me contento con grabarla, es una lástima no poder pillar el sonido sobrecogedor, que nos ha puesto sobre aviso, y que se va disipando lentamente, si se ven las rocas cayendo por la ladera, se distingue perfectamente el humo que van dejando a modo de rastro en su caída. El espectáculo es fascinante, nuestro guía Youdy, nos deja disfrutar sin mostrar el menor signo de impaciencia, aprovechamos que lo tenemos solo para nosotros y le bombardeamos a preguntas, ha venido mostrándonos la flora local, nos explica sobre el bosque primario y secundario, formados a los pies del Arenal, se distingue perfectamente el espeso bosque tipo selva del primario, del cañaveral ligero, de especies gramíneas del secundario, tras la explosión de 1968, toda la zona de "secundario" queda arrasada por la lava, y la recuperación, si bien inexorable, es lenta.
Nos muestra la mimosa púdica, curiosa planta que al menor roce queda arrugada, y con apariencia poco apetecible. Con renuencia nos despegamos de la magnifica vista, agradecidos de haber podido disfrutarla, el tiempo nos ha dado la tregua exacta, en una suerte de composición temporal óptima, la zona del volcán ha estado despejada en el momento que nosotros estuvimos allí, mientras que otra excursión en otro horario, no tuvo tanta suerte. Es de suponer que desde nuestra habitación del hotel tenemos una magnifica vista del volcán, pero no lo podemos asegurar ya que solo se ve el gris de las nubes, enormes nimboestratos que impiden la visión, el ambiente esta cargado de humedad así que el calor es opresivo, de vuelta al hotel decidimos gastar el resto de la mañana en darnos un chapuzón.
Creo haber leído que hay un camino que lleva al río, un río es un río, y siempre me ha parecido que le da mucha vida a una zona, así que dejo a la familia en la piscina y voy en su busca, hay que subir hasta la zona más alta del hotel, y en el momento de coger el senderito hay un cartel enorme que dice que entras bajo tu responsabilidad, bueeeno, enseguida me encuentro con el canopy, ahora entiendo lo de los 150 m. de los que hablaban, claro, el río esta abajo, y los cables discurren por encima del abismo, los americanos que están haciéndolo se lo están pasando pipa, adrenalina a raudales y un entorno precioso, continuo hacia abajo, nuevamente parece que este en la selva, como en Tortuguero, pero esta vez en vertical, el camino baja haciendo eses, el terreno es irregular y esta clarísimo lo del cartel, me detengo a hacer unas cuantas fotos, en un momento dado hay que saltar, es poco, como un metro, pero las condiciones desde luego no son las idóneas, me lo pienso, voy sola, Pablo no sabe donde estoy, y tardaría en preocuparse de buscarme, humm, desecho la idea del río, y vuelvo para arriba, traspaso el canopy y el cartel, y, comienzo a bajar por un sendero diferente al que había accedido, que suerte! estoy empapada en sudor y allí mismo hay una pocita perfectamente acondicionada y vacía!, es la mía me quito el vestido, zapatillas, y me meto...por Dios! no puedo ni entrar, el agua esta como para cocer unos frijoles! que bárbaro! bueno no es tanto como para cocinar, así que con un rato más logro meterme entera, empiezo a bajar hacia la piscina convencional donde están estos, también termal pero desde luego más fresca y con bar, según bajo voy viendo el resto de las pozas creo que hay unas 12, todas súper-coquetas, logro traerme a David, vamos probando a medida que subimos de nuevo y nos quedamos en la que mas nos apetece, es súper-agradable, el agua caliente, el día que había estado inseguro toda la mañana, se arranca a llover, lluvia tropical, intensa, unos goterones enormes, el momento es mágico, el entorno, la lluvia repicando en la superficie de la poza, los ruidos del volcán, se oyen desde aquí, de vez en cuando, amortiguados por la distancia, un momento para atesorar. Por fin, Pablo se decide a venir también, echamos allí el resto de la mañana, y salimos de un relax exquisito.
Ha estado lloviendo buena parte de la mañana, pero cuando salimos de la poza y sigue en ello, no nos hace ninguna gracia, es nuestro único día en esta zona, y queremos ver el pueblo de La Fortuna, a escasos minutos en taxi, en la habitación nos duchamos y cambiamos tranquilamente, como haciendo tiempo para que aclare, ni por esas, me rindo y saco chubasqueros para los cuatro. Le pedimos al taxi que nos deje por el centro, nos mojamos para buscar un sitio para comer y resignados acabamos en un burguer por petición infantil, algo bueno tenia que tener, cuando salimos...ya no llueve!, estupendo, incluso en un fugaz momento a lo largo de la tarde logramos ver el volcán al completo, desde nuestra posición parece que se erige al lado del pueblo. Paseamos, echamos una cervecita y unos refrescos, hacemos compras, charlamos con la gente, a sabiendas de que es el único rato que vamos a tener para ir a nuestra bola, aquí siempre hay una sonrisa para el viajero, se hace de noche y cenamos en un acogedor restaurante. Ya en el taxi, nos tienta el hecho de ver el volcán de noche, la lava cae y la oscuridad facilita su visión, pero todo el día ha estado encapotado, y justo antes de anochecer seguía así, por lo que renunciamos a ello y volvemos al hotel.


GUANACASTE

Vemos claramente que el hotel de Guanacaste esta donde Cristo perdió el mechero, ninguna población en el camino, creo que a partir de ahora, desconfiare de los "todo incluido", ya que creo que todo esta incluido, por que realmente no tienes forma de escaparte... bueno el hotel esta muy bien, todo hay que decirlo, sobre el mar, en la ladera de una colina, nuestra habitación esta arriba y el restaurante, bar, piscina y por supuesto mar, están abajo, bueeeeno, de alguna manera había que "bajar" todo lo que engulles con ese sistema del TI, afortunadamente llegamos para la hora de la comida, y tenemos toda la tarde por delante, así que tiramos de restaurante, bar, piscina, bar, playa, bar de piscina, bar, piscina, playa etc etc, al día siguiente (nuestro último día snif!) me muero de asco tanta piscina, playa y bar, y me cojo un kayak, para echar un rato haciendo algo para variar, los 3 islotes del fondo, se elevan tentadores..., están lejos sin duda, pero...me pongo en marcha en su dirección, es agradable hacer funcionar tu cuerpo, traspaso el embarcadero en construcción que esta a unos 300 m. de nuestro hotel, y sigo remando, en un momento dado, me doy cuenta que sigo en el mismo punto que hace un rato!, como puede ser?, no hay oleaje, el mar esta como un plato, una brisa ligera, me estoy boicoteando a mi misma? inconscientemente me da miedo estar tan lejos de la orilla, no saber que hay debajo, me da un poco de repelus, pero de ahí a remar remar y no moverme!, redoblo mis esfuerzos, bueno sobrepaso una playa diminuta, y una bastante grande, la brisa o las corrientes, me hacen rectificar el rumbo de vez en cuando, un poco más, me digo a mi misma, cuando alcance a ver las rizaduras del agua rompiendo contra los islotes me doy la vuelta..., miro para atrás y estoy lejísimos, y me queda la vuelta..., veo una pincelada blanca y me doy por satisfecha. Las olas que cortaba de frente a la ida ahora escapan de mi, por lo que parece que no avanzo, si antes tenia que rectificar el rumbo a menudo ahora es constante, mete el remo para frenar y que el kayak no se vuelva en dirección contraria, empiezo a pensar que ha sido una temeridad irme tan lejos, tras un momento de pánico, que me hace plantearme cuanto tardarían del hotel en venir a por mi, me sereno y me doy cuenta que solo estoy cansada pero se avanza tan bien como a la ida, empiezo a pasar los hitos en que me fijaba a la ida, y por fin llego a la playa, la voy a regañar!, el encargado de los kayaks, se ha ido muy lejos y ya estaba a punto de ir por usted!, pongo cara de poker, y de hacer esto todos los días, y le digo que no es para tanto, pero le agradezco haber estado atento, me doy un baño y a la pisci, tras un intento baldío de zumo de frutas solo, me tomo el zumo de frutas con ron que me ofrece el muchacho, buffff, la combinación de ejercicio, sol, y alcohol, me lleva directa a una hamaca de la piscina, siempre digo que soy incapaz de estar un rato tomando el sol, pero ahora estoy a gusto como media hora... todo un logro.

Tras la comida hemos alquilado un todo terreno con la familia de Ricardo, los 7, nos vamos a Tamarindo, el destino esta lejos pero nos han asegurado que hay ambiente playero, surfero, y animado, así que pasamos de playa del Coco, más cercana, y nos dirigimos a la aventura, el mapa te ofrece una aproximación a las carreteras costarricenses, pero hay que echarle algo de imaginación, nos perdemos en un par de ocasiones, preguntamos a dos parejitas jóvenes en el camino, miran dentro del vehiculo, y contestan con un ligero retraso, nos parece raro, y encima nos indican mal, tras unos kilómetros más en dirección errónea damos la vuelta hasta el cruce donde creíamos habernos equivocado, bueno... Tamarindo es ciertamente lo que nos habían dicho, un sitio agradable, la playa tiene unas olas estupendas, sobre todo comparándolas con la playa de nuestro hotel dentro del golfo del papagayo.
Aprovechamos para hacer compras, en las tienditas de recuerdos que jalonan la calle principal, y paseamos respirando el ambiente surfero, de la ciudad. La vuelta es por supuesto de noche (a partir de las 6 ya es noche cerrada), dudamos de la dirección a tomar, y nuevamente preguntamos, Jesús baja a hablar con un lugareño que le extiende la mano con ademán equívoco, tras un instante de duda, hace la consulta y completa, a su manera, el saludo iniciado por este, son gente amable, pero es de noche, no controlamos la situación y eso genera inseguridad, pero con sus indicaciones conducimos en la dirección adecuada.

19 de abril de 2009

Ferrata del Sorrosal


Si hay algo infalible para sacar lo que llevas dentro, osea, para visitar el baño, es montarse una actividad de las que llaman de riesgo, pierde cuidado, que nadie va a decir a 100 metros del suelo que le duele la tripa por que tiene que ir al baño, todos han ido antes de empezar, los pimientos que NO picaban de la noche anterior, ayudan bastante.
Cris, que se debate entre las dos opciones, "ferrata o no ferrata", se rinde al sentido común de hacerse 500 Km. ella sola hasta Madrid, al día siguiente, con la paliza de rigor y se queda en tierra :-( otra vez será, seguro. Así que ella y Adri se ocupan de los peques de la casa Alicia y Daniel.
El resto nos enfundamos en los arneses y nos dirigimos a la imponente pared, embarcados en una aventura palpitante. Recelo de David, le recalco como media docena de veces que SIEMPRE tiene que estar enganchado a la línea de vida por, al menos, una de las dos bagas, que lleva en el arnes, obviamente el guia hace lo mismo, además decreta que lo que el dice va a misa, a él y a Martin, de hecho, yo creo que esto último esta más dirigido a Martin, cuasi-adolescente, de aspecto (y hechos) independentistas. Esta picado por que su hermano, más pequeño, va delante de él por imposición del guia, aun así confio en que se suavizara con el sugestivo recorrido que tenemos por delante.
El fragor del agua se mete en nuestros oidos, el deshielo en los Pirineos, ejerce un claro influjo de introspección en nosotros, ya que toda comunicación queda anulada al lado de la cascada de 100 metros de impetuosa caida. La orografia de la pared, es fascinante, se aprecian a la perfección las lineas de plegamiento aparentemente caotico, formadas por el empuje de nuestra península, en su afán de europeizarse, 80 millones de años antes de que nadie hablara del tema.
Una vez dentro del cañón, podemos ver que el agua ha labrado su propio camino, millones de crecidas han oradado el cañón de unos 20-25 metros de altura, a razón de quizás 1 cm cada 10.000 años. El ambiente es humedo, la rabiosa corriente vaporiza agua que se pega a nuestras ropas, mojándonos. Con la seguridad mental de nuestro equipamiento caminamos por las grapas adosadas a las paredes, sujetándonos a la línea de vida y los salientes de la roca.
La bestia negra de Pablo, aparece en el estrecho cañón, a sus ojos el puente encoge y las aguas trocan en rabión (bueno esto último es cierto). Mi marido me mira con pensamientos homicidas grabados en el rostro, jajajja, en este instante, estoy segura, esta jurandose que nunca jamás lo volvere a engañar diciendole que puede hacerlo. Pero si que puede, claro que puede, su problema solo esta en su cabeza, yo no lo meteria en ningun sitio REALMENTE fuera de su alcance, pero si el problema es imaginario...y ademas insiste... Aun así, es gracioso comprobar como se atasca en el punto en el que ya habia pensado atascarse, lo vió en el video, y fue lo único que dijo que le ocasionaria problemas, y en efecto ahi esta esperando al guia a que vaya a rescatarlo. El guia llega y obviamente no hace nada, todo lo hace él, pero le acompaña por el estrecho tronco, su situación no ha cambiado ni un ápice, pero ahora si que pasa...A partir del puente, me alegro de llevarlo a dos tramos (y dos personas) de distancia, ya que me lo imagino rezongando y me mina la paciencia y el aplomo si lo escucho, cuando llega al final del tramo del rio, echa pestes, y tiene aspecto de cansado, pero ha pasado, creo que le joroba haberlo hecho y no poder quejarse diciendo que no puede hacerlo, aun así, cuando se/nos enteramos que estamos a mitad del recorrido y desnivel, pone su mejor cara de martir y sigue adelante.
Comenzamos a subir por senderos estrechos, en todo momento al borde del precipicio, Espe, detrás mio, va estupendamente, la posibilidad de hacer la ferrata, estoy segura que le esta proporcionando dosis masivas de las endorfinas que en la vida diaria generas mucho más despacio, asi que disfruta una cosa bárbara. Angelito, va despues con cara de estar pasando el mejor rato en mucho tiempo, ya sabia yo que le iba a encantar. Generalmente mis propuestas que suelen entrar, sin más consideraciones, en el saco de vaya-ideas-tiene-esta-loca, precisan del trampolin de Angel, alguien "normal" que tambien quiere hacerlas, como puerta de acceso al grupo.
Martin y David, van delante mio, ahora se les oye a la perfección, van discutiendo, como no; que capacidad para la polémica, es increible, que si vas muy lento, que si antes no me has dejado pasar, que si yo tengo más (y mejores) cartas magic...buffff, que estres, trato de evadirme viendo el paisaje y grabando unos videos, nuestro guia, que va delante de ellos, y estara aburrido del mismo camino de siempre, estara preguntandose si son normales, estar donde estan, dirimiendo estupideces.
David, fantasea con una hipotetica tirolina hasta el pueblo...200 metros de desnivel, no estaria mal, menudo viaje. La realidad es otra, el GR, por el que se baja del monte, es en realidad una torrentera, con secciones pedregosas y otras, las más, acuaticas, el agua baja por donde puede, ansiosa por llegar a su destino, igual que nosotros, hambrientos y cansados, pero satisfechos, realmente merece la pena imaginar caminos y andar.
Mis videos dispersos (que ya son uno solo en la inmensidad de youtube), quieren reflejar la magia del esfuerzo, en una naturaleza agreste, impetuosa e indomable, salvo por si misma, en un intento de captar su esencia para la vida.

8 de marzo de 2009

ice climbing

De repente hielo y nieve empezó a caer sobre mi casco, me habían sobrepasado mientras estaba absorta en el esfuerzo, por lo que no me había dado cuenta; las chanzas sonaron 10 metros más abajo, ahí sufriendo!, muy bien aguanta!. Sufrir si pero no por la esperada lluvia, que ya había presupuesto que sucedería, quedarme en el mismo punto que mi anterior intentona me daba coraje, subir, estaba a mi alcance, en ese momento falló mi piolet mejor asentado, la pared se desplazó de repente hacia arriba, y al instante yo colgaba de la cuerda ¡mierda!, si hubiera aguantado más… la lluvia de hielo no duraría mucho más…y yo estaba agotada para otra intentona, ¡que frustración! Estaba ahí, a mi alcance…y…no estaba dispuesta a abandonar, unos segundos recuperándome, respira hondo, asienta los pies, clava el piolet, buff, realmente estaba agotada, o lograba ganchear, o no iba a poder hacerlo, otro intento, me pareció que apenas había enterrado una minúscula porción del pico, forcé hacia abajo, aguantaba, así que busqué otra marca de anteriores subidas para meter el izquierdo, realmente ninguno me convencía, pero…a morir por Dios!, ahí arriba tendría tiempo de asentarme, si lograba subir unos centímetros.
Ya eres mío!!, ufff!, esto si que mola… estaba casi-segura de que podía!
Si mi madre estuviera abajo, idea absurda hasta el infinito, estaría pensando que estoy loca y que algo hizo mal cuando yo fui pequeña, para que ahora ande haciendo semejantes estupideces, pero como esta a kilómetros, y nunca se enterará de la mínima parte de lo que hago, solo piensa que soy rara.

Yo estoy que reviento de alegría...Mis compañeros me animan diciendo que lo he hecho estupendamente, y aunque suelo ser escéptica, sobre todo conmigo misma, las palabras calientan mi espítitu…
Realmente me siento bien, y atisbo que cuando escalo, lo hago buscando exactamente esta sensación…traspasar mis limitaciones, un paso cada vez, no importa que solo sean limitaciones para mi, mis compañeros están a años luz de donde yo me encuentro, pero yo he dado un paso, en la dirección que quiero, sin metas, solo Camino.

Mis pies flotan dentro de la botas empapadas, los guantes que una vez compré "por si acaso" y que ¡benditos sean!, estaban en mi mochila, después de ceder los míos más calentitos a mi hijo que mojó los suyos nada más salir del coche, se mantienen casi-secos. Los pantalones adecuados para andar por el monte con tiempo bueno, están humedecidos y toda yo estoy entumecida, tras 15 minutos a pie de vía, que rápido se enfrían los ánimos rodeada de nieve ;-)
Una parte del grupo se va a hacer otra vía más difícil, así que contemplando mis posibilidades inicio mi retirada.

El camino de vuelta es agotador, los crampones de la época de Edmund Hillary, atados con correas a mis zapatillas, pesan como losas, me equivoco una vez siguiendo huellas que se desvían pero pronto retomo el camino correcto, vuelvo a pasar por la corriente de agua casi oculta por el hielo, y aunque sigue pareciéndome un paso peligroso, lo cruzo más confiada que a la ida. Ir sola hace que te plantees cosas que con grupo ves de otro modo, si pierdo pie en la torrentera como mínimo saldría calada y con un golpe, y a 4 o 5 grados y 3/4 de hora hasta el refugio...da que pensar.
El camino me gusta, todo esta blanco y cuando salgo de la oscura cara norte en que me encuentro, los restos del día brillan en la pradera nevada. Estoy cansada de todo el día pidiendo a mi cuerpo mucho más esfuerzo del que esta acostumbrado, pero disfruto esa sensación como un raro placer, mis posibilidades de realizar lo que he hecho hoy son pocas o ninguna, así que hasta la más desagradable de sus consecuencias me parece maravillosa.

Mis chicos, están en el refugio, han vuelto empapados, David lloraba, sus zapatillas estaban totalmente empapadas y el frío mordía sus pies, una ducha caliente, calcetines secos y zapatillas de repuesto, arreglan la situación. Entran y salen de refugio, los perros que esperan fuera son una fuente segura de juegos. No te mojes, no hay nada seco...repetido unas 80 veces no impide las salidas constantes. Alguien hace un vivac para que los perros pasen la noche y mis hijos entran los primeros.
En mi afán de reducción de “cosas a acarrear monte arriba”, prescindo de mis zapatillas de recambio así que me pongo 3 pares de calcetines y me apalanco al lado del fuego de la chimenea.

Las ventanas ya no ofrecen luz diurna. Charlamos y leemos revistas esperando la cena. David que suele tener un aguante sobrenatural apoya la cabeza en la mesa entre plato y plato, hasta que lo subo arriba y lo arropo dentro del saco. Martín desconecta después de contar chistes a su lado de la mesa y lo subo 15 minutos más tarde. El comedor esta vacío para cuando nuestro grupo se levanta de la mesa, subo a nuestra litera triple para 4 y me meto en el saco.

Mi cerebro dormido me dice que son más menos las 3 de la mañana y David que le sangra la nariz, tanteo un pañuelo en el bolsillo de mi pantalón de pijama y se lo paso, él se queda dormido ipso facto, pero yo me quedo en duermevela. En el silencio de la noche una atronadora canción me saca de ese pseudo-sueño, y me muerde las tripas, conozco la melodía. El mundo de esos otros 30 compañeros de habitación agotados por todo el día en el monte, colisionan de frente con el de mi hijo mayor, con su despertador a todo volumen a la hora adecuada para el día anterior, las 6:30 de la mañana...tierra trágame! bajo casi-volando de la litera y busco a tentones el teléfono, se lo subo a él, y lo zarandeo para despertarlo ¡hug!, desconéctalo! que no vuelva a sonar!.
Silencio, en media hora empieza la desbandada, y para cuando nosotros empezamos a movernos, la habitación esta vacía.

El desayuno, es ideal, zumo, café caliente, pan (de verdad) tostado y mermelada. Ese ligero retraso que comenzó a las 7 de la mañana, se ve ahora en el hecho de que nuestro grupo es el único que queda en el refugio. Que remolones!

Todo lo que ayer estaba mojado, hoy esta mojado, no hay forma de rescatar nada, ante eso y la perspectiva de volver a dejar marido y progenie aburridos en el refugio, opto por lo más sensato, iniciar el camino de vuelta y aprovechar el día de otra forma. Mi grupo se va monte arriba, hoy vuelven a escalar, más cascadas, más nieve, más esfuerzo. Y yo hago mis 4 petates, y voy monte abajo.

5 de marzo de 2009

cheia cheia

mi gozo en un pozo!!!, el video no sube, es muy grande y no me da el espacio. :-( quizas tenga que hacer limpieza, lo que me faltaba, además de en casa, tambien aqui...buffff
no en realidad no sube por que es super-grande y aunque tuviera el espacio inmaculado no subiria, si consigo recortarlo y que entre, lo subo, pero en previsión de que no este por la labor..., lo tengo en la ofi, plaza san bartolomé 1, bajo, de 9-14 y 20-22 horas, podeis pasar con un lapicerillo y si no, el jueves lo llevare alli en CDs
conseguido!!!, solo el 1º minuto...pero menos da una piedra. Si tengo tiempo mañana subo lo siguiente